Nuestra Parroquia lleva mucho tiempo empeñada en ser autónoma en la financiación, cubriendo los gastos con los ingresos que, en su totalidad, son de la comunidad parroquial. Esta autofinanciación es posible gracias a la generosidad de vuestras aportaciones en las colectas tanto semanales como extraordinarias, los donativos de los sobres, las transferencias, las donaciones particulares y principalmente por la domiciliación de recibos que nos permiten una mejor previsión de ingresos.

 

Desde el Consejo de Economía queremos daros las gracias por vuestra colaboración económica, pero sobre todo por la labor que generosamente prestáis al implicaros en la organización y participación en las actividades parroquiales, así como en el cuidado y limpieza de las instalaciones y mobiliario de la Parroquia.

 

Siempre tenemos motivos por los que alabar a Dios por sus dones, y gracias a vuestra implicación y pertenencia a la comunidad, podemos elevar a Él una acción de gracias porque, poco a poco, pero con paso firme, estamos demostrando con los hechos que la Iglesia, en la actualidad, no podría llevar adelante su misión evangelizadora sin la colaboración de sus fieles.

 

El Consejo de Economía está formado por 7 miembros: el párroco, un vicario y 5 laicos. Ellos se encargan de la gestión y el asesoramiento de los recursos económicos de la parroquia y cuyo objetivo general que persiguen es realizar una administración comprometida que busque unos ingresos estables que permitan afrontar los gastos ordinarios y extraordinarios, con el fin de permanecer y sostener la plena autofinanciación.

 

En este sentido procuran que la comunidad parroquial tome conciencia de la realidad económica actual y repare que sin las aportaciones de sus miembros no puede llevar adelante su misión evangelizadora.

 

Nuestro cardenal nos comunicó recientemente que un cristiano que no se tome en serio su responsabilidad económica con relación a la Iglesia no ha llegado a entender plenamente la comunión de la que forma parte gracias al bautismo y la Eucaristía. Por eso, el Consejo Económica se encarga de que todos cuidemos permanentemente tres aspectos:

 

  • Marcar la casilla correspondiente a la Iglesia en el impreso de la declaración de la renta.
  • Fomentar la cuota de inscripción parroquial.
  • Seguir aportando en las colectas.